Las cosas estaban cambiando pero parecia ser la única que las veía cambiar. Creí por un momento que toda la vida iba a ser igual, pero absurdo pensamiento me dejó sin palabras. Hechos que jamás creí que podrian suceder, cosas en la vida que jamás creí ver, los tenia frente a mis ojos. Me siento mal, nada me huele bien y puede que todo esto se acabe algun día. Cuando era más pequeña no tenia esa sensación es más, creí que jamás acabaría y la frase aquella "nada es para siempre" resonaba con mas fuerza cada vez en mi interior que me aturdía, me ganaba por knock out. Y si hacia algo para cambiarlo? para que las eseranzas no acabaran? temia que eso pasara rapido, el veredicto final, culpable. Bla bla bla... como odio todo esto, tener que crearme una vida nueva y todo porque la gente no valora lo que tiene desde pequeña ay dios, unas ganas de derramar lágrimas vienen y van, pero no lo hago porque debo ser fuerte, al menos alguien que lo sea. Y ahi me encontraba yo, ese era mi deber "deber que no servía para nada visto y considerando", ya fue, si la vida quiere jugar asi, yo moveré la pelota al compaz. Ahora iré y agarraré mis planos para seguir con mi trabajo, renunciaré al pasado y abriré puertas a mi presente que me asusta un poco y me extraña con su innovación. El futuro ya ni cerca, ya ni cerca puedo pensarlo ni a punto imaginarlo. Dejo que mi mente se disperse en unos trabajos, en el estudio, que es ahora mi máximo ascendiente, provecho. Y yo seré el amor suicida, llorando por los rincones reconrdando el ayer y esperando el mañana.